Luzmila Beatriz Albornoz Ordonez

A private mass will be held on Saturday, April 22, 2023 at 1pm at the Church of St. Timothy located at 21 Leith Hill Rd, North York, Ontario. Luzmila Beatriz Albornoz Ordoñez, born in 1927 peacefully passed away in her home in North York, Ontario on April 15, 2023. She was predeceased by her husband Antonio Arteaga Tamariz, son Miguel Arteaga Albornoz, granddaughter Jessica Paz Arteaga, daughter-in-law Caronne Purvis Arteaga and son-in-law Ojars Vieglais. She is survived by her children: Rafael, Hernan, Maria Eulalia, Juan, Eliana, Carlos Eugenio, Soraya, and Jose Alfredo; her 25 grandchildren, 15 great-grandchildren, daughters-in-law, son-in-laws, brother Rodrigo, and sister Gladys. We will always cherish her memories. Luzmila's love for her family, her strength, and her ability to overcome life's trials, along with her faith in Jesus, are examples she leaves for us to follow. We will miss her forever. She lives in our hearts. A private mass will be held on Saturday, April 22 at the Church of St. Timothy located at 21 Leith Hill Rd, North York, Ontario. Flowers can be sent to 24 Truxford Road, Toronton, Ontario M3A2S6. Or, you may choose to plant a tree in memory of Luzmila Beatriz Albornoz Ordoñez. For more information, please visit https://archivestore-inc.demo.tributecenterstore.com/memorial-tree" Eulogy Decía algún poeta cantor “Caminante, no hay caminos, se hace camino al andar”. Permítanme que al evocar a nuestra querida Madre LUZMILA BEATRIZ ALBORNOZ ORDÓÑEZ, logremos transitar por los senderos y caminos que ella en su afán de vida los hizo y recorrió durante los casi 96 años que el Supremo Creador la concedió; Un 20 de Mayo de 1927 vio la luz primera en la Ciudad de Cuenca-Ecuador en el hogar de sus amados padres Rafael AlBornoz Cabanillas (nacido en Lima, Peru) y Clemencia Ordoñez Pigout cuya madre fue originaria de Burdeo, Francia. Fueron sus hermanos Raúl+, Leonardo+, Efrén+, Rodrigo, Sarita que coincidialmente o por alguna razón cerró también sus ojos el mismo día que nuestra Madre, seguramente quisieron acompañarse en el postrimero viaje; Aidita+, Gladys y Rafael+. Pasó su alegre niñez y juventud en medio de sus compañeras de escuela y colegio y de sus hermanos y primos que felices vacacionaban en la hacienda “Josefina” de la abuela. Con la envidiada apacibilidad que brinda el entorno familiar. ¡Historias que siempre estaban en su memoria y nos contaba hasta el final! Pasaron los años y empezó su vida laboral, por algún tiempo prestó sus servicios en una antigua compañía aérea llamada “Panagra” de secretaria. Posteriormente laboró también en la Municipalidad de Cuenca, a cargo de los “Comedores Municipales” de ayuda para la gente necesitada, accionar que fue elogiado por su organización y comprensión humana. Caminando por la época juvenil, paseaba su belleza en medio de la muchachada y su flirteo, por lo que su abuela francesa le apodó con cariño 'muchachita engreida' (Petite galette en francés). Luego llegó el amor y a sus 21 años contrae matrimonio con nuestro Padre Antonio Arteaga Tamariz+ y así empieza la dinastía Arteaga -Albornoz, nosotros, 9 hermanos (Rafael, Hernan, Eulalia, Juan, Eliana, Miguel+, Carlos, Soraya y José Alfredo), todos hoy despidiéndole a nuestra Madre, excepto Miguel+ que se adelantó hace poco para recibir a su Madre y su tía Sarita en el cielo. Madre amorosa y sacrificada con sus hijos, supo inculcarnos sempiternos valores de honestidad y pulcritud, sobre todo el amor y respeto a Dios y nuestros semejantes. Luego por el año 1970 decidió venir a Canadá donde radicaba su hermano Rafael+. Con duro afán organizó a la familia en este nuevo destino y hoy aquí está una numerosa familia con sus 9 hijos e hijas; 25 Nietos y 15 Biznietos. Hoy en medio de nuestra tristeza alegramos nuestros corazones con el recuerdo de sus canciones. Sabíamos que Mamita estaba por allí si oíamos la canción Granada, o Perfidia, o Vereda tropical y muchas más, una ilusión para nosotros desafinados hacer dúo con ella, así cantábamos y reíamos. Te extrañamos Madre, encaminamos por los senderos que nos enseñaste pues ahora podemos decir parrafeando al poeta: “Caminante, si hay caminos, nuestra Madre nos dejó el camino a andar”.